—Mami… Mami, despierta. —Un insistente susurro me despierta de mi turbio y oscuro sueño—. Mami… Hay alguien haciendo ruidos feos en el sofá… ¿Será un monstruo?
Abro los ojos con dificultad y me estiro en la cama para escuchar de nuevo la pequeña voz de mi hija, quien se abrazaba a mí con temor. Estoy por reírme y decirle que no hay nada que temer, pero entonces recuerdo la visita inesperada de anoche.
¡Mierda!
Me siento de golpe y con ese gesto solo logro asustar más a Liv, por lo que entro en razón, niego con la cabeza, le sonrío con dulzura y le digo que no se preocupe, que un amigo vino a nuestro hogar porque no tenía dónde pasar la noche. Esa información la relaja y de inmediato se pone a ver dibujos animados, pero yo estoy todo, menos relajada.
¿Qué pasará cuando Logan se despierte?
¿Recordará todo lo que me dijo anoche?
¿Me seguirá gritando?
Suspiro y le doy un beso en la mejilla a mi hija, pidiéndole que se mantenga en la habitación mientras preparaba el desayuno. Ella s