Nicole estaba en la oficina de Kylian en el hospital veterinario. Sasha le trató las heridas y estuvo con Selene mientras esperaban noticias de Zeus. No le dijo a su familia lo que había sucedido, pero estaba preocupada por lo que sea que estuviese planeando Kylian.
Nikolas y Sasha no tenían buena cara, pero tampoco decían mucho. Selene estaba nerviosa y tenía miedo de preguntar si era porque Maksym y Fabrizio venían a Irlanda por alguna razón que desconocía también. Ellos viajaban a cada rato y llegaban como fantasmas. Por eso siempre estaban en todos los lugares, solo que antes no sabía que eran mafiosos.
—Sacerdocio... —fue lo que llamó su atención.
Ella miró a los chicos, pero volvieron a guardar silencio.
—¿Qué pasa con el Sacerdocio? —les preguntó.
—Vienen a ver a Zeus. Se nos dijo que ya salió de cirugía y está bien. Kylian se está bañando. Vendrá a verlo y después nos iremos por un asunto de trabajo —le contestó Nikolas.
—¿Qué asuntos de trabajo? ¿En serio vienen a ver solo