Capítulo 10 Ella no puede alcanzarte aquí.
Eco.
Me levanto al oír la alarma, froto mis ojos acostumbrandome a la claridad de la mañana.
<
>Ordeno mi cama cuando veo la ventana abierta ¿Que no la había cerrado ayer?<>Es lo único lógico que encuentro y la cierro. Por otro lado dormí como reina, siento mis piernas ligeras y relajadas. No me despertó ningún ruido, de hecho no hubo ruidos. Pienso en la extraña mano falsa que estaba en la pared y me pregunto si tiene algo que ver, además los diarios que encontré incrementan mi curiosidad de saber a quién le pertenecen.<>Me baño y comienza la misma rutina. Bajo las escaleras y me sirvo un poco de cereal. Veo a mi madre como se peina, haciendo un moño su cabello. La curiosidad es tentadora.—Mami ¿Tu tienes o tenías algún diario antes?—pregunto sin rodeos.Ella me mira con el ceño fruncido y vuelve la vista.—¿Porque?— dice, mirando