—¿No dirás nada?
Amelia observó Azriel, este levanto una ceja esperando la respuesta a su pregunta, pero ella tembló de miedo y siguió con su debate interno.
—Parece que es demasiado tonta, ¿Cómo no decir la verdad? Parece que ella cree que eso de lealtad existe
Abigail se burló, mientras Azriel la observaba de manera seria y parecía ser que se encontraba furioso
Ella no daba las respuestas que esperaba y precia demasiado sumida en sus pensamientos para poder hablar
¿Qué acaso no le temía lo suficiente? Azriel se preguntó si tenía que hacer un poco más, demostrarle que, aunque tuviese miedo a otro hombre
Él debía ser su mayor temor en aquel instante, pues él sería quien acabaría con su vida
Pero antes de que ella pudiese siquiera decir una palabra, observo como Abigail levantaba el bate y sin más le daba un fuerte golpe en la pierna.
Aquello que logro hacer sentir un dolor tan terrible a Amelia, que dio un grito que resonó en todo el lugar.
Esta parecía dolorida, sufriendo, pues al pa