¿De qué habla Gerald? ¿Esto es un juego? ¿Se burla de ella? ¿Ahora?

Scarlett se mueve hacia atrás para deshacerse del agarre.

—Tatiana Montgomery. ¿Sabes quién es?

Los ojos de Scarlett se abren con la mención: su madre. Hay demasiadas cosas que no puede comprender en estos momentos. Pero lo que sabe es que no puede creer en Gerald ni en nada de lo que haga. La mención de sus hijos y su madre es un revuelco a su estómago, a sus entrañas. Cada paso en falso significa un paso lejos de sus hijos. Aunque trate de negarlo este hombre sigue siendo su esposo, y como tal, puede aprovecharse de eso.

—Haré que te curen todas las heridas. Te llevaré a un lugar mejor y te llevaré con ellos. Pero debes calmarte. Estás-

Scarlett se zafa de su agarra finalmente. Se gira, sus ojos fijos en la puerta del jet. Gerald no tarda en tomarla de la mano y moverla. Con el nombre de sus hijos Scarlett se apaciguó, aunque ya no lo rasguña o se comporte arisca, lo mira con duda y de reojo. No está a gusto de reci