~Luck~
—¡Maldita estúpida! ¡Casi me destroza la pierna! —se queja Grecia de dolor.
Su pierna se ve hinchada y la sangre no para de salir.
—Te juro que me las voy a cobrar.
He traído a Grecia a su departamento, en el hospital no la revisaron, no hace otra cosa que quejarse por todo. Ella misma se buscó su mal, ahora debe soportar.
—Debo regresar al hospital, cuando decidas que te atiendan llama a emergencias —le digo a Grecia, mirándola.
Se levanta de golpe agarrándose la pierna.
—No puedes dejarme sola, mira cómo estoy.
—No es mi culpa que por tu estupidez ahora estés mal.
Me doy la vuelta para irme y la escucho hablar.
—Vas a ir a verla, ¿verdad? Prefieres ir a ver a Marian que quedarte conmigo. La maldita ya se ganó tu amor, ojalá se muera.
Pierdo el control y la paciencia, me volteo a verla.
—¡Ya deja de meterte en mi vida y de opinar! Yo puedo hacer lo que quiera, y sí, voy a verla, la prefiero a ella antes de quedarme contigo que estás dañada —la agarro de la cara—. Estás mal de