~Marian~
He venido a ver a mi madre para saber cómo sigue, los médicos aún no tienen una respuesta, están esperando que su cerebro se desinflame para saber cuáles serán las consecuencias. Sigue conectada a la máquina que le ayuda a respirar y me gustaría que se levantara pronto de esa camilla y poder ser una mejor hija para no sentirme culpable por su estado.
—Hija, ¿podrías ir a la recepción y preguntarle a la inepta de la secretaria si tiene los papeles que le pedí?
—Claro que sí! Padre.
Me levanto para hacerle el favor a mi padre y camino llena de paciencia hasta la recepción, estoy por hablar y una voz llena el espacio.
—¡Código azul! ¡Paciente aparentemente joven con paro cardiorrespiratorio debido a un accidente automovilístico! ¡Repito! ¡Código azul! ¡Quiero listo la sala de cirugía ya mismo!
Me volteo por el escándalo y veo el paramédico que va encima del hombre haciéndole reanimación, al bajar la mirada el miedo llega a mí y las lágrimas empiezan a salir sin ningún tipo de