Zeke se quedó sin aliento al ver a Nohemi; aunque ella rechazó de plano contratar a un estilista profesional, al menos aceptó la ayuda de Camerina. Adicionalmente, la mejor amiga de ella, Megan, se apareció esa mañana y complementó a la mágissa en todo el proceso de transformar a la pelirroja.
Desde que la invitó hasta el día de la fiesta pasó poco más de una semana, fueron días agradables en los que Nohemi se dedicó a dos cosas, aprender de Rina sobre magia y manejar sus poderes ―tuvo pequeños avances en ese aspecto―; lo otro fue mejorar la relación con él.
Tras su primera vez consciente con Zeke, descubrieron que el vínculo continuaba igual; Camerina se rio de él, le mencionó burlona que estaba actuando como un adolescente enamorado y le recordó que tenía que ser paciente.
―El vínculo está allí, eso ya es una buena noticias ―habló con un deje de cariño que solo usaba cuando necesitaba coaccionar a un niño―. Ahora solo debes dejar que las cosas tomen su cauce natural. Ya te uniste a