Rebeca
Fue genial sorprender a mi turco .
Verlo feliz me hace feliz y, como siempre, nuestra follada estuvo muy caliente.
Este hombre es tan maravilloso, hermoso, encantador y cariñoso, y celoso como la m****a.
Nunca he visto a un hombre tan celoso de él.
Amo su hermosa sonrisa y esos ojos verdes que me vuelven loca cuando me miran. Parece que es capaz de devorarme con solo una mirada.
Amo tanto a este turco que hasta me quedo sin aliento de amor.
Solo estoy preocupada por él, ayer tuvo fiebre repentina y quería que fuera al médico en lugar de ir a este viaje de negocios.
M*****a sea, ya tienes tanto dinero, ¿por qué trabajar tan duro?
Eso debe ser lo que le da asco, te confieso que ver a mi amor así no fue agradable.
Nathifa llegó por la tarde y nada más pasar por la puerta ya estaba disparando:
“Mi hermano me ordenó que no apartara mis ojos de ti. Ahora ven, vamos a dar un paseo, cámbiate y vámonos.
- ¡Está bien, cálmate!
Yo, eh, otro loco!
Corrí al dormitorio, me puse