JHARED
Me quedo inerte viendo a mi amigo postrado en la cama en estado de coma. Su cabeza y partes del cuerpo están vendados, y se puede notar que fue un gran golpe que pudo haberle costado la vida.
No contesté su llamada; volví a fallarle a alguien que me importaba.
Aprieto mis puños con fuerza, presionándolos encima de mis rodillas. Cierro mis ojos, sintiendo que mi cabeza pronto va a estallar con tantos pensamientos que se acumulan dentro de mí.
Unas horas atrás…
La lluvia comienza a caer con fuerza sobre mí y esta ilusión de la persona que alguna vez amé y que ahora me atormenta.
Miro fijamente sus ojos tratando de entender qué está sucediendo, y de repente sus labios tocan los míos y doy un traspié asombrado.
—¿Eres tú en realidad? —levanto mi mano hacia su rostro, y ella coloca la suya sobre la mía sonriendo incómoda.
—Soy quien dicen que extrañas… pero yo no te recuerdo —responde, y se aleja tomando mi mano entre las suyas.
—No entiendo… yo… —Miro a mi alrededor conf