4
Megan
—Quita tus sucias manos de ella —dice Ezequiel con la voz ronca, tengo que pestañear varias veces para fijar la mirada en él y darme cuenta que está completamente desnudo, salvo por su ropa interior.
—¡Wow, qué mierda es esto!… ¿Megan? —dice y es cuando reacciono
—¡Ezequiel, baja esa arma! —grito
—Claro que no, tu niño tonto, vas a tomar tus cosas y te vas a ir de esta casa para nunca más volver ¿entendido? —yo trato de interponerme—. ¡¿ENTENDIDO?!
—Si.. si… mierda Megan
—¡NO VUELVAS