Él
Miro a Lucía con la mirada perdida, la abrazo fuerte en mi regazo y nos quedamos un tiempo en silencio. No quiero hablarle más de mi, ni tampoco lo que he hecho, porque además de lo ya sucedido ella pudiera sentir más miedo y yo solo quiero que se sienta con la certeza que ahora yo voy a cuidarla.
—¿Qué es lo que haremos en la isla? —pregunta
—Refugiarnos por ahora, no quiero que alguien pudiera dañarte… —la miro con las marcas por todos lados y niego varias veces—. Más de lo que yo he hecho.
—¿Todos iremos a la isla a vivir?, ¿sabes por cuánto tiempo? —yo niego, la verdad es que no ten