El CEO manoteaba por qué se sentía desesperado, había pasado mucho tiempo en la oscuridad y ahora después de la cirugía seguir en el mismo estado, lo angustiaba, era muy fuerte, sí, pero el recuperar la vista le cambiaría la vida enormemente
— ¡señor Rodríguez, debe permanecer así un tiempo, es por su bien, por favor guarde la calma! — un enfermero llegó para auxiliar a Alejandra, Deeguel, no se podía esperar
— ¡Cariño, por favor, debes estar tranquilo, el doctor vendrá a verte pronto!
— Señora Rodríguez, le aplicaremos un sedante a su esposo, no podemos permitir que se saque las gasas o la cirugía se puede ver comprometida, esto le ayudará a calmarse y a dormir otro poco
— No, no me duerman, quiero saber cómo salió la operación.... — el CEO se volvió a quedar dormido, Ale, tenía los ojos húmedos, no le gustaba ver a su marido así, pero si era por su bien lo aceptaba
Jhonatan, llegó una hora después apurado, le habían informado que su jefe se había alterado después que despertó
— A