C112- LO QUE MÁS AMABAN.
C112- LO QUE MÁS AMABAN.
Sofía subió los escalones con el corazón golpeándole en la garganta. La puerta principal se abrió de par en par con un empujón suyo y el eco de sus pasos resonó en el vestíbulo.
—¿Dónde está mi madre? —soltó sin aliento y con los ojos encendidos por la urgencia.
El ama de llaves levantó la vista desde una bandeja que llevaba.
—Luna Ailyn está en las guarderías —respondió con premura, señalando el ala este—. Fue a asegurarse de que los pequeños estén cálidos.
Sofía asintió con un gesto rápido y echó a correr por el pasillo. El aire olía a pino húmedo proveniente del bosque colindante con la villa. Sus botas golpeaban el suelo pulido, impacientes, y sus manos temblaban por la urgencia de hablar; tenían que actuar ya, antes de que...
De pronto, un crujido seco atravesó la calma de la villa y luego vino el primer rugido. Sofía se detuvo con el estómago encogiéndosele y, a lo lejos, desde la zona del centro de mando, se elevó una columna de humo que ennegreció el c