Capitulo 43
WIll.
Hacía apenas tres horas que la deje en la cama durmiendo y ya la extraño.
Pero tengo una empresa que requiere de mi presencia, aún así decido enviarle un mensaje a Carol y continuar con nuestra charla, esa que dejé a medias en el jacuzzi.
Yo:
Buenos días, nena. Espero te hayas comido el desayuno que te dejé… Cómo bien dijiste anoche; nunca me pediste que te contará nada, solo yo puedo decidir que hacer. Y quiero continuar dónde nos quedamos. Atte: tu sueño eterno.Su respuesta llega en seguida, con una tonta sonrisa lo leo.
Carol:
Me la comí toda, estaba deliciosa, gracias. Cómo te dije anoche, me alegra saber que quieras contarme todo lo que tú quieras. Gracias por hacerme feliz, te amó. Atte: tu chica por siempre.Sonrió como el maldito hombre enamorado que soy.