Pasaron dos días. Eran tranquilos para mí, nada nuevo. Trabajo, casa y nada más . Aquella tarde cuando llegué al apartamento Samantha ya había llegado también, pero Helena no. Fui a darme una ducha mientras Samantha leía un libro recostada en el sofá. Me puse ropa cómoda y me senté con ella.
- Cómo se está llevando Helena los últimos días. - Observé. - Ni siquiera puedo hablar con ella.
- Sí. - Dijo demasiado concentrada en el libro para prestarme atención.
- Tal vez aún no esté en la escuela, pero salió con Daniel. Al menos podría enviar un mensaje. - yo dije.
Ni siquiera levantó la vista para hablarme. Sonó el timbre y fui a abrir, porque Samantha se quedó inmóvil. Estaba un poco acorralado cuando vi a Therry en la puerta.
- ¿Quién esperaba? ¿Jonathan? preguntó en voz alta y clara.
Me di cuenta cuando Samantha levantó la vista del libro. Vi una extraña expresión en sus ojos.
- ¿No me invitas a entrar? preguntó.
- No. no voy a invitar - yo dije.
Una vez más parecía haber estado bebie