Se que Antonio odio cada palabra que salió por mi boca, odio mas que estuviera del lado de Agustin, pero más odio a mi nene, por haberme enamorado, lo que el no sabia es que Agustin llego a ser la luz que necesitaba en mi camino
—¿Qué tiene el que no tenga yo? "!Nada!" no es nada comparado conmigo, es un hombre sin gracia, estúpido e insípido y no sabe cómo hacer disfrutar a una mujer, la señora Montgomery debería intentar mirarme
—No sé que tanto me mira usted a mi señor Conrado, no me veo diferente a lo habitual, acabemos con esto, contesten de una buena vez, no tengo paciencia ni tiempo, necesito que mi principe descanse ¿O será que quieren que mis hombres los ayuden? Ellos no tendrían problemas en ayudarlos a elegir.
— No necesita humillarnos así, no hemos hecho un daño grave a Agustin, solo le enseñábamos su lugar, tenía que entender cuál era en esta casa, tiene que entender cual es su lugar en la vida
—Hay fue donde comenzó su error, Melanny ayúdame llevando a mi esposo al carro