Capítulo 29
Adrián y Raquel continuaron charlando sobre sus intereses, algunos de los cuales Raquel ya conocía, como el amor de Adrián por los autos de lujo, ver deportes y las noticias.

"Tengo otro garaje que alberga todos mis autos, puedo dejar que Max te lleve en uno más elegante que te pueda gustar." Sugirió él, pero Raquel arrugó la nariz.

"En realidad, Adrián. He estado pensando en conducir yo misma ahora, me siento mucho mejor," comentó Raquel. Después de perder al bebé, dejó su auto en la casa de su madre y a menudo, tomaba un Uber o un taxi, pero eso fue antes de mudarse con Adrián.

"No," insistió él. "Max debe estar ahí para conducirte."

Cuando ella frunció el ceño, Adrián añadió: "Confía en mí, por favor. Para que todo funcione, siempre debes dejar que Max te conduzca."

No es que a Raquel le desagradara el conductor, pero anhelaba una interacción amistosa. Max era un hombre de unos cuarenta años pero muy en forma. Constantemente usaba un traje negro, y era un poco aburrido. "Solo desear
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App