— Gabriel, aparentas ser despiadado e insensible, pero en el fondo ¡temes a los Reyes! —Camila hablaba cada vez más fuerte—. Tal vez mi padre te impuso alguna restricción, o quizás conoces el poder oculto de los Reyes. Les temes a todos en los Reyes, ¡por eso no te atreves a tomar medidas reales contra ninguno de nosotros! ¿Qué tal? ¿He dado en el clavo?
— Tú... ¡no eres más que un cobarde!
Camila estalló en carcajadas, con la expresión de quien ha descifrado completamente a Gabriel.
El rostro de Gabriel se volvió extremadamente sombrío.
Al parecer, haber borrado sus recuerdos sobre el Templo de Banda Verde la había vuelto arrogante y delirante.
¿Acaso no sabía que Sombra Mortal número uno y Sombra Mortal número dos ya estaban muertos?
Una oleada de ira crecía en el pecho de Gabriel.
Por consideración a la bondad de su padre adoptivo, incluso cuando estaba furioso, nunca había causado daño real a las hermanas de los Reyes.
Inesperadamente, esta consideración había llevado a Camila a cr