Irse

Amora llevaba 3 días en casa del alcalde y el pequeño Gabriel no se separaba de su lado.

Le había quitado el estrés y la había relajado.

Sin embargo, sintió miradas, pero no podía ver a nadie mirándola, se dio cuenta que el pequeño Gabriel también notó las miradas, pero no le importó.

Faltaban pocos días para la audiencia y tuvo que ir a ver a Rosa Dourada más tarde ese mismo día.

Amora suspiraba recordando la mirada que le estaba poniendo cuando el pequeño Gabriel habló;

"No te asustes, el tío Vampiro es genial"

"¿Tío Vampiro?"

Amora estaba un poco confundida, pero decidió seguirle el juego al niño, necesitaba distraer su mente en cualquier forma que pudiera.

"Sí, no quiere hacer ningún daño, sólo ve cómo están las cosas y se va."

"Pensé que los vampiros sólo podían salir de noche"

Amora entonces se acordó de William, pensó que la fantasía que tenía de que era un Vampiro, ya lo estaba volviendo loco.

"Loco, un tipo que vive solo en el bosque y dice ser vampiro está completamente loc
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP