—Ya han revisado al pequeño y está en perfecto estado. Ahora mismo le están dando leche, pues moría de hambre — sonreí —. ¿No han dicho nada los doctores?.
—Es un alivio que este bien... mi pequeño — el corazón bombea de felicidad al saber que tengo un hijo —. Ya llevan mucho tiempo ahí dentro.—Va a estar bien, es una chica fuerte — suspiré —. Han agarrado al abogado, por fortuna Elián ha sido muy rápido en llegar al edifico. Se lamenta el no haber llegado a tiempo...—Esta vez no dejaré que por nada del mundo esa rata salga de la cárcel — apreté los puños —. ¿Cómo es que se ha escapado de la cárcel?.—La corrupción, hijo. Doménico pagó por su libertad — nuestras miradas se encontraron y sonri&oac