Capítulo 40: Hablemos
Antonio había llegado en tiempo récord a la empresa y al encontrar el local donde se supone estaba la traidora de su esposa, no dudó y dio un giro temerario para ingresar a la zona de estacionamiento.
Lamentablemente el cálculo le fallo y los frenos fallaron provocando que las llantas patinaran por el pavimento, provocando que chocara con otro de los autos que estaban estacionados en el lugar.
Obvio que el ruido provocó que las personas que estaban pasando y los que estaban cerca del lugar se reunieron para tratar de ayudar o por el placer de informarse sobre lo ocurrido.
- Que alguien llame a la ambulancia.
- ¿Creo que sigue vivo?
- Ayuden.
- La puerta está bloqueada.
Esos eran los gritos de las personas que se acercaron a ayudar, ya que notaron que el conductor de uno de los vehículos seguía dentro del auto y estaba inconsciente.
- Parece que hubo un choque – mencionó Abel frunciendo ligeramente el ceño.
- Últimamente hay mucho loco al volante – opinó Erika hac