Cap 24. Tu sangre.
DEVAN
Estoy en la cafetería del ala este, libros abiertos, café frío y mi atención luchando por mantenerse en la página.
Llevo casi dos horas fingiendo que estudio, cuando en realidad solo revivo sus besos, su voz, el olor de su cabello mojado en la cama.
"Mi mandarinita".
Mi diosa infernal.
Estos días han sido increíbles con ella, y no me arrepiento, pero no puedo permitirme dejar de lado mis responsabilidades.
Ser su compañero también implica ser digno de ella, no solo apechicharla con pasión entre las sábanas.
Me obligo a enfocarme... hasta que el rugido de los lobos rompe todo.
Giro la cabeza, alertado por el estruendo de garras contra piedra, patas corriendo, gruñidos urgentes. La cafetería se llena de tensión. Todos los presentes se detienen. Algo va mal.
Muy mal.
Me levanto de golpe, dejando el libro abierto. Corro. Salgo.
Y entonces la veo.
Mi mundo se parte en dos.
-¿¡Qué pasa!? -grito mientras corro hacia ellos.
Dos guerreros traen su cuerpo entre sus brazos. Inconscient