De tanto llorar y pensar en lo que haré me quedé dormida.
Escucho a lo lejos que mencionan mi nombre, despierto asustada y me siento en la cama con la mano en el pecho.
- Mamá Maya me asustó que pasa. Pregunto confundida.
- Nada cariño, solo que Alexander te ha estado llamando y tu no coges el teléfono y me dijo que viniera a la habitación a verificar que todo esté bien contigo y los bebés.
Ah y también me dijo que a las siete pasará por tí. Vamos levantate que ya solo faltan veinte minutos y tienes que ponerte linda para tu hombre. Me lo dice con una sonrisa.
- Mamá Maya no tengo nada de ganas de ir a esa cena que dice Alexander.
La verdad es que no quiero estar cerca de él pero eso no se lo digo a ella.
- Vamos hija a levantarce que yo te ayudo a levantarte esos animos, no debes dejar plantado a tu hombre esta noche.
Yo me levanto solo por complacerla a ella que la veo tan entusiasmada. Me meto al baño y me doy u