Él me observa feliz, toma mis labios con los suyos en un beso voraz y desesperado que enciende cada centímetro de mí e inmediatamente yo le respondo con igual velocidad.
Brandon me levanta de la silla, tomándome en sus brazos y me besa, acorralándome contra la pared, sus manos se apoderan de mí, tomando todo a su paso, inundándome de su olor, el calor de su cuerpo, el subir y bajar de su pecho respirando fuertemente y el latir salvaje de su corazón. Me quita el abrigo, y los suéteres que tengo debajo, y yo hago lo mismo con él.
Luego una de sus manos está detrás de mi cuello manteniendo el beso y otra recorre mi espalda, sus caderas aprisionan las mías, presionándome sus rodillas chocan con mis piernas y siento como me presiona más y más contra la pared. Estoy atrapada y ruego por no salir.
—Yo quería besarte por primera vez a ti… hacer el amor contigo solo contigo— confiesa mientras yo toco su espalda fuerte y ambos respiramos profundo cuando una de sus manos sube por torso y se