8 de abril de 2021
Giselle
Lo que le sucedió a Claire me había dejado muy asustada. James se había ido junto con Andrew, y sinceramente deseaba que no hubiesen cometido un crimen en contra de su padre por lo que este le hizo a mi hermanita, mientras que Camila e Irene llevaron a la más joven a la casa de Andrew. Quise quedarme en casa porque sentía que el aire se me estaba escapando de los pulmones y mi estado de ánimo no le ayudaría a la menor.
El aire estaba pesado, como si la casa misma estuviera conteniendo la respiración. Yo me encontraba allí, en el salón, sola, con la mente llena de pensamientos que no podía apaciguar. El sonido del viento agitando las hojas afuera era lo único que rompía el silencio.
Entonces, escuché la puerta abrirse. Imaginé que se trataba del amor de mi vida así que no hice nada más que quedarme quieta esperando.
La puerta del salón se abrió con un crujido, y su figura apareció en el umbral, tan imponente como siempre, su rostro distorsionado por una rabia