Las palabras de Chad hicieron que Elliot se levantara bruscamente de su silla.

Avery probablemente había regresado para informar a los niños del resultado. Layla no quería ir con él, pero Avery le había dicho que no la convencería. En consecuencia, Elliot tendría que ser el que volviera a casa y calmara a la niña.

Cuando Elliot volvió a la villa Río Estrellado, lo primero que escuchó al salir del coche fue a Robert llorando.

Se preguntó por qué Robert estaba llorando.

Elliot sintió que su corazón se tensaba mientras caminaba hacia la villa.

Dentro de la enorme sala de estar, la señora Cooper abrazaba al sollozante Robert y se esforzaba por tranquilizarlo.

Elliot entró directamente sin cambiarse los zapatos, se acercó a la señora Cooper y echó una breve mirada a Robert, que lloraba a mares.

"¿Qué le pasó a Robert?".

"¡Debería subir las escaleras y ver cómo está Layla, Amo Elliot! Ella está llorando aún más". La voz de la señora Cooper sonó un poco ahogada. "Avery se fue con Hayd