Asagi fue derecho a encerrarse a su dormitorio dejándome a mí sola preparar la casa y algo para comer para la llegada de nuestros invitados. Mientras escuchaba Imagine Dragons acomodé los almohadones de la sala, limpié un poco la cocina y barrí el piso; preparé té y galletas y encendí el aromatizador de ambientes automático. Subí a darme una rápida ducha y me cambié de ropa, estaba terminando de maquillarme cuando sonó el timbre de la casa. Fuser ladró anunciando que había llegado alguien, me fijé por la ventana de mi habitación y vi a Nicholas y Kentin que venían juntos.
—¡Ya bajo, chicos! —les grité desde mi habitación.
—¡No hay problema! —dijo Nicholas con una sonrisa.
Fuser seguía ladrando, tuve que agarrarlo del collar y llevarlo hacia el patio trasero.
—Ya, ya, gordo. Sólo son Nicholas y Kentin, no pasa nadab —le dije mientras lo llevaba gentilmente, le di una galleta para que se calme y cerré la puerta del patio. Ahora sí estaba en condiciones de recibir a mis invitados.
—¡Hola