Capítulo 28

Dmitry despierta sintiéndose un poco mareado, no recuerda haber tomado anoche, solo ese té que le envió su madre.

Se pone de pie con algo de dificultad y se da una larga ducha esperando que ese malestar pase pronto.

Antes de salir, llama a un restaurante para hacer una reserva, la llevará a desayunar y luego a un lugar especial.

—Buenos días, señor, ¿Cómo se siente? —le pregunta a Johnny notándolo un poco desorientados.

—Buenos días Johnny la verdad es que aún me siento un tanto mareado ¿sabes qué fue lo que ocurrió anoche?

—La señorita Emira estuvo aquí, la vi salir de su habitación poco después que me topé con su esposa —le informa sabiendo que esa noticia no lo tomará nada bien.

—¿Qué has dicho? Esta vez me va a escuchar.

Se dirige a la sala buscándole a Jay primero y para su sorpresa no está sola, Emira está allí.

Todos aquellos recuerdos amargos del pasado le caen en cuestiones de segundo haciéndole dar Un paso atrás.

—Dmitry, mi amor, esperaba poder hablar contigo