Lara avanzó con paso firme hacia el altar, y la expresión de triunfo de Rowdy rodó por los suelos.
— Ella está aquí, pensé que habría huido — Le dijo por lo bajo a Ashley que no dejaba de mirar a Waylon y la cara de hombre profundamente enamorado que tenía con sus ojos brillantes clavados en la rubia.
— ¿Pensaste que no se casaría? — Le preguntó incrédula — Nunca perdería esta oportunidad de oro, ¡A veces no entiendo donde tienes la cabeza, Rowdy!
Waylon alargó la mano para tomar la de Lara y ayudarla a subir la escalinata frente al párroco que oficiaría la ceremonia.
— Señoras y señores, estamos aquí reunidos para presenciar la unión de estas dos parejas, Waylon y Lara; y Rowdy y Ashley, su amor es un ejemplo de perseverancia… y bla, bla, bla.
Ni Lara ni Waylon