La vergüenza me invade por completo, sobre todo, porque Taddeo empuja a su padre y este no se mueve, aumentando el enojo del pequeño que nos observa como si quisiera regañarnos.
— ¡Aléjate de mi madre! — grita Taddeo y yo quiero desaparecer.Porque lo que menos quiero es que por el grito de Taddeo, más personas nos vean siendo demasiado íntimos en un lugar que mi jefe y novio, utiliza para su trabajo en casa o reuniones importantes y privadas.‘En términos generales, soy una persona que tiene una reunión importante y privada.’ Me digo mentalmente.Al pensar ello, me quiero golpear, por justificar un comportamiento inapropiado que fue visto por un pequeño que debería proteger de cosas así.— Kendrick, aléjate un poco, por favor. — digo y Taddeo asiente mirando a su padre con enojo.— No puedo. — dice Kendrick y yo lo obs