No supe nada de Briss despues de que se fue del hospital, y la verdad lo agradecía, lo que menos quería ahora mismo era verle la cara, lo detestaba tanto, lo unico lindo que tenia me lo habian arrebatado por su culpa, estaba dolida y sentia como si una parte de mi habia muerto tambien con mi bebé.
Intento levantarme de la cama en el momento en que la puerta se abre y entra mi abuela por ella, corre ayudarme, pero niego alejándome de ella.
—Yo puedo hacerlo sola, no te preocupes —niega ayudándome de todos modos.
—Se que estas dolida, y lo entiendo,pero no voy a dejar que te hundas en el dolor, si tienes que llorar alzo, pero no te escondas, eso empeorara mas las cosas —me abrazo con fuerza a su cuerpo sintiendo el dolor como recorre todo mi cuerpo. Dejo que las lagrimas que no he derramo salgan de mi, mi llanto es tan desgarrador que escucho como ella tambien lo hace conmigo.
—Tranquila cariño, todo estara bien.
—No…no lo estara…perdí lo unico bueno que tenía…cada dia luchaba por m