Hay algo en los dos que provoca tranquilidad, creí que mi madre estaría incómoda cuando los vi, pero no – Lucy no me dijiste que los dueños del bar son tus amigos – por eso los fui a buscar mamá, para presentarlos, ellos son Daven y Einar, los dos son dueños del bar – mi madre queda mirando a Einar, él venía conmigo – un gusto, soy Einar – un gusto – y ustedes… ¿De dónde son? – mamá – trate de que no hiciera preguntas raras, pero fue demasiado tarde – de Noruega, llevamos unos años ya en Londres – por eso se me hacía conocido su acento, una de mis chicas viene de allá – Lucy nos hablo mucho de usted, es diseñadora de modas – Daven comenzó a hablar con ella.

Las horas fueron pasando, me puse al día lo que más pude con mi madre y Terry, estaba de un lado a otro, hablando con todos. Ya era hora de que mi madre y Terry se fueran, no se quisieron quedar conmigo, habían reservado una habitación en un hotel -cariño, no dejes de hablarnos – no mamá – se despide y sale del bar – tu y yo tenem