Capaz de todo.
Érika Camel
Cuando Dominico junto a dos hombres de seguridad bloquearon mi auto en el parqueadero pensé que si me desmayaría.
Estaba atrapada, lo sabía. Ni siquiera podía hacer otra cosa más que descender del auto y enfrentar las consecuencias. Finalmente se había cercado el cerco. Ahora yo era víctima u victimario. No podía imaginar en qué estado estaría Derek.
Tenía que enfrentar su ira, si desprecio y todo el cúmulo de emociones que descubrir el engaño hubiese desatado en él. El único problema es que me estaba sintiendo como la m****a. Un cosquilleo en las manos me recorría todo el cuerpo. Estaba mareada, y intensamente fatigada al punto de costarme respirar.
Antes de bajar del auto tecleé un mensaje a Julie.
«Me estalló la verdad en la cara, fui descubierta de la peor manera... por favor ven por mi. Me estoy sintiendo como la m****a. Tenías razón en todo no debí exponerme a esto. No demores… solo ven por mi»
— Venga conmigo Señora Erika Camel. Por extraño que parezca mi Hermano D