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InicioCazando al Ceo.
Cazando al Ceo.

Cazando al Ceo. ES

Romántica
Anne Zamora  Completo
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105Capítulos
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Resumen
Índice

Sinopsis

Jefe / CEOObsesiónSecretoAmor doloroso

“Cazando al CEO” «Ese CEO es mío, yo lo vi primero» Erika Camel, lo tiene todo. Si alguien tuviera que describirla en una palabra, esa sería sin duda alguna “Despampanante”. Un rostro:Perfecto, Un cuerpo: Lujurioso y lleno de curvas listo para encender la pasión de cualquier hombre que la mire. Una mente: Absolutamente brillante, y acompañado de su perseverancia de acero, la convierten en una triunfadora innata... todo lo que se propone esa bendita mujer lo sobrecumple. Dos doctorados, uno en Administración de Empresas y otro en Finanzas; la convierten una de las más conocedoras del mercado en el que opera su compañía. Sus rivales en los negocios la llaman la “Perra Fría” Es la principal heredera de la familia Camel, Dueña de su propia compañía, tiene una familia cariñosa y un novio que la ama casi tanto como a su dinero. Su principal defecto: “Lo caprichosa”; este sale a relucir cuando el destino le pone en su camino a el camaleón de los negocios en New York. En una convención en Alemania conoce a Derek Meyer, CEO de una importante empresa Alemana con sede en New York ocasionando que el Perfecto y muy planeado mundo de Erika se ponga patas arriba. Su nuevo plan... Comenzar a trabajar con Derek, pero no desde su empresa, sino como asistente personal del CEO de la principal empresa de la competencia. ¿Para cuando se descubra su juego de seducción...ya la presa habrá caído en la trampa?

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Último capítulo

  • EPÍLOGO

    EPÍLOGO(Cinco Años Después)Fráncfort, Alemania.Érika CamelEl frío del invierno me hace abrazarme más el cuerpo, mientras espero paciente que Derek Mayer llegue hacia mi con un enorme ramo de flores que acaba de comprar del otro lado de la calle.Lleva la semana completa llenándome de regalos, y no es casualidad que estemos en esta helada ciudad justo hoy.Hoy es el día de nuestro quinto aniversario. Nuestras bodas de Madera, como metáfora de un árbol que crece y necesita de crear una base sólida para prosperar y crecer. Nuestra unión estaba en su mejor momento y se mostraba resistente con el tiempo.Nuestros dos hijos estaban junto a sus tío Dominico Mayer, y Julie Camel de Mayer, porque mi hermana después de tantos años por fin decidió cambiarse el apellido Peterson al de nuestro padre, y todo motivada porque deseaba que su primer hijo tuviera el nombre del hombre al que le debía prácticamente todo en la vida. Evidentemente papá y yo fuimos los más felices con su decisión,

  • CEO Cazado.

    Érika CanelEntré en la mansion de los Mayer y todo estaba en total quietud. Dominico fue el primero en aparecer por el living con un pantalón de pijama y una remera también negra. En las manos traía un vaso de cristal lleno de leche. Parecía un Niño pequeño on un bigote blanco sobre el labio superior.Julie se acercó a su flamante nuevo esposo sonriendo encantada y le besó con mucha dulzura la comisura de los labios.—Delicioso—susurro ella contra los labios de su esposo y rodé los ojos ante el hecho de tanta comolicodad. Aún no me podía creer que ese par de revoltosos inatrapables se hubieran casado antes que Derek y yo. Era totalmente increíble... en el sentido más literal de la palabra «increíble».—Hola Cuñada— me saludo Dominico Justo después de que acabo de comerse viva a su esposa. —Derek está en su habitación…. Se fue a dormir temprano, ya sabes…. Sueño embellecedor para estar «bien Alemán y bien matador» mañana en la boda.Julie se partió de risa y yo tuve que disimula

  • ¿Un Sugar Daddy?

    Érika y Camel Supuestamente debería estar en una despedida de solteras, «mi despedida de soltera», pero embarazada de tantos meses la idea no me resulta nada atractiva.Lo que es probable que ocurra es que caiga infartada si un stripper cachondo me muestra su miembro, o puede que me dé risa… no todos los días uno se topa con un semental vergón como con el que estoy a punto de casarme.No puedo beber tampoco, así que no tiene caso alejar a Julie de su flamante esposo, solo por pasar la noche nosotras dos como un par de monjigatas.—Vete a casa de tu esposo Jul— le dijo negociando con ella— Creo que yo hate exactamente lo mismo.—Érika Camel… es de muy mala suerte que el novio vea la novia… desde la noche antes hasta la ceremonia— me advierte Julie apuntándome con un dedo.—Y lo dice la mujer que consumo un matrimonio antes y después de la ceremonia… que para colmo fue a escondidas en Las Vegas— le recordé.—¡Touche!— admitió hiriéndose con una katana imaginaria a modo de harakiri.—Pe

  • Tarde de Hermanas

    Érika CamelMientras Julie hablaba sentada en mi cama frente a mi, menos daba crédito a lo que me trataba de contar. Tenía que tratarse de una broma .—¡Aún no te puedo creer Julie!¿¡Cómo así que te casaste en Las Vegas!? —pregunté con los ojos como platos y cada vez más sorprendida. —Pero cómo ocurrió, si cuando te marchaste esa tarde parecía que habías erradicado a Dominico Mayer de ti cerebro. No te dije nada sobre qué el también estaría en Las Vegas… pero no creí que las cosas llegarían a este nivel.—Solo ocurrió Erick… me lo pidió y no le pude resistir— se explica y aún no entiendo una mierd@. Para colmo lleva ese anillo de fantasía con un engarce que es más falso que judas. Y de la piedra ni hablar… ni siquiera es vidrio o una imitación aceptable. Es plástico y bastante feo. —¿!A este anillo fue a lo que no te pudiste resistir!?—chillo tomando su mano para analizar la «anti-joya», más bien debería decir la «basura» que lleva en su dedo anular.—No fue el anillo Ericka. El anill

  • Boda Premium

    Julie PetersonSi alguien me pregunta alguna vez algún detalle de mi boda… sin duda diré que me dolía el trasero. Creo que eso era lo que más iba a recordar de toda esta locura.También podría rememorar el orgasmo anal que me proporcionó mi futuro esposo una hora antes, pero bueno eso no era algo que se le contara a todo tipo de público.Me vestí con un sencillo vestido blanco ejecutivo, y Dominico se metió en un jeans con camisa blanca y un saco negro casual. Si no nos deteníamos... era un hecho que terminaríamos casados. Abordamos un taxi en plena madrugada y nos dirigimos a la icónica capilla Graceland.¿Hay algo más típico en Las Vegas que casarse ? A la par que el juego, las bodas son el principal atractivo de Las Vegas. Cada año se celebran más de ciento veinte mil bodas, siendo el segundo lugar del mundo en el que más matrimonios se celebran por detrás de Estambul.Sabia a donde nos dirigíamos, ese lugar era famoso. La Capilla Graceland era la capilla más famosa de Las Veg

  • Consuma el matrimonio y luego cásate

    Dominico MayerSiempre supe que totalmente cuerdo quien dice cuerdo del todo, pues yo no estaba… o era que quizás la crianza que me había dando mi madre en cuanto a relaciones matrimoniales pues no había sido la mejor, porque aunque mi padre murió siendo yo muy Niño aún recuerdo que ella parecía odiarlo a él y a todo lo que su esposo representaba. Así siguió años después... los Mayer para ella no valíamos nada, y después de su muerte quedó aún más claro. Entoces no es muy difícil de entender que después de pedirle a Julie Peterson que nos casáramos… hasta yo mismo me espanté de la intensidad de mis sentimientos hacia esa mujer. No sé de donde demonio había salido esa loca idea de casarme pero me parecía ahora lo más lógico y lo más acertado. Ya ella había huido… y allí estábamos de nuevo. Ya había ido tras ella, así que me merecía el premio mayor y ya no me conformaría con menos. Siempre dije que no me casaría, y ahí estaba pidiendo matrimonio de la manera menos convencional posi

  • No creo que tú supieras  lo que quieres… ¡ni esa noche ni hoy!

    Julie Peterson El borracho afianzó su agarre sobre mí y traté inútilmente de clavarle mi codo sobre las costillas, pero él muy maldito estaba envuelto en grasa. Dominico seguía frente a su arma, y no parecía asustado.Otra vez avanzó otro pasó mientras medio bar gritaba y se alejaba de nosotros.«¿dónde estaba la seguridad del bar cuando uno la necesita?»Exactamente eso mismo pensé yo, pero nada. De la seguridad ni sus luces. El tipo comenzó a subir su agarre por mi abdomen buscando mis senos para toquetearlos y Dominico lanzó su última fría advertencia.—¡O la sueltas, o te muelo a golpes!— espetó furioso con la vista fija en las manos del tipo tocando mi abdomen. Me sentía asqueada de ser tocada por un desconocido contra mi voluntad. Dominico en un dos por tres se acercó un poco más, y tomó el arma del tipo, que no se esperaba que el joven que tenía en frente fuera tan osado « vale decir que yo tampoco me lo esperaba».El puño del Alemán se entregó en la boca del borracho hacién

  • ¿Cómo se te ocurrió irte así a un bar en el corazón de Las Vegas?

    Dominico MayerTotalmente frustrado, y odiando al mundo por mi mala suerte, salí de esa habitación. No me quedaría escondido bajo mi cama solo porque ella anduviera oronda, paseándose por todo el hotel, y el casino. Necesitaba salir de allí, poner distancia. Las Vegas era una ciudad enorme y llena de lugares a los que irse sin que tuviera que ver ese rostro de ángel malvado que se cargaba la muy inconsciente. Lleve mis dedos y presione el puente de mi nariz, aún me costaba creerme que ella estuviera allí… tan cerca y tan lejos. Me hacía El Fuerte, pero lo cierto era que la muy descarada había calado hondo en mi interior. Si esta situación continuaba así, me volvería loco tratando de manejar el deseo casi enfermizo que sentía por ella. La había hecho rabiar, algo había aprendido a conocerla, y al coquetearle a la recepcionista pude ver esa llama de ira encendiéndose en sus ojos. No era Justo que yo siguiera evocándola cuando ella me había dejado tirado a la primera «literalmente».

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105 chapters
Prólogo
Cazando al Ceo. /Anne Zamora
New York, octubre del 2021.Derek Mayeer—Señorita Julie, por favor, infórmele a Dominico que lo quiero en mi oficina, ¡ahora!— mi tono esta mañana no es amable, estoy a punto de gritar.—Si señor Derek, cómo ordene—ella responde respetuosamente y cierro la línea de intercomunicación con mi asistente. Sigo rondando por mi oficina hecho una fiera, esperando el momento que Dominico se decida a honrarme con su presencia. Estoy por demás impaciente y mi hermano se da el lujo de hacerme esperar precisamente hoy. Con esta, ya va la tercera vez que lo llamo en los últimos diez minutos.«¿Cómo diablos esa mujer lo volvió a hacer?» La duda me martillea en la cabeza. Me resultaba increíble que estando tan alejada de sus negocios cómo afirmaban en las noticias, la tal Érika fuera capaz de haberme arrebatado de las manos el jugoso contrato por el que llevaba más de dos meses trabajando sin aliento. Al parecer la organización de su matrimonio no le quita tanto tiempo como dicen. «Es una Bruja».
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Así comienza la historia.
Cazando al Ceo. /Anne Zamora
 Abril 2021Narrador OmniscienteErika Camel y Julie Peterson  fueron amigas desde la primera infancia. Se conocieron desde mucho antes de que el padre de Julie perdiera todos sus bienes en apuestas clandestinas y su casa hipotecada fuera rematada por el banco. Desde entonces las niñas jamás se habían separado.La familia Camel acogió a Julie como a otra hija, y ella ciertamente veía en Érika a su única hermana. Ambas habían prosperado juntas, habías sido educadas bajo los mismos principios morales. Ambas habían matriculado y se graduaron en  la misma universidad y a sus 26 años de edad eran aún inseparables. Leer más
Blanca Nieves
Cazando al Ceo. /Anne Zamora
Derek Meyer Mi Nombre es Derek Meyer, CEO de una de las empresas más importantes en el rublo de la tecnología con cedé en Manhattan, New York. Mi fama de prepotente, arrogante y dominante me antecede. Soy implacable a la hora de hacer negocios, y mantengo lejos mi vida sentimental de mi organizada y exitosa vida laboral. Tengo 33 años y actualmente soy soltero, después que mi prometida decidió romper nuestro compromiso. O más bien me presionó a llevar a cabo una boda a pocos días de haber muerto mi madre. Eso detonó mi mal genio, pues me negué este sentado en un banquete de bodas sabiendo que ese mismo mes enterré a mi madre. No ha nacido la mujer que juegue conmigo, o me ponga un ultimátum. Ella sabia ese día que jugó su última carta, me perdería para siempre. Casi enloqueció cuando mi hermano comentó que debería viajar a Alemania a arreglar asuntos urgentes sobre el futuro del patrimonio que habíamos heredado, pero eso no justifica su terrible actitud. Ademas, en este viaje al
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Cae porque Cae
Cazando al Ceo. /Anne Zamora
Erika Camel Salí de New York en medio de una terrible nevada. El frío me calaba hasta los huesos y me hacía sentir melancólica y abstraída. La nieve siempre me transportaba a aquel invierno en que mi madre murió, después de haber luchado por años contra una penosa enfermedad. Aunque era bien pequeña,aún me llegan varios recuerdos con la suficiente nitidez como para saltarme las lágrimas. Intenté fervientemente de apartar esos pensamientos tristes de mi cabeza, como cada vez que me abordaban los recuerdos desafortunados de esa época. Me sentía emocionalmente agotada, después de cada discusión con Mark. Ya esa relación no me  Leer más
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Erika Camel  Luego de estar un rato fuera hablando telefónicamente con Julie regresé al salón  donde se estaba desarrollando el cóctel. Fui al baño, repasé mi maquillaje quedando otra vez impecable y me dispuse a salir para comerme al mundo, o a cierto CEO sensual en su defecto. Caminé contoneando mis caderas sabiéndome sexy, mi cuerpo siempre había dado de que hablar entre la población masculina que me rodeaba, así que por qué no usar eso a mi favor por una vez en la vida. Me posicioné cerca del bar con un martini Bombay en mano y espere tranquilamente saboreando una aceituna que Derek Meyer se acercara por una bebida. La noche era
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Cazando al Ceo. /Anne Zamora
Derek Meyer  —Yo la asistente de Emiliano Alberti— explicó—ahora estoy trabajando por mi cuenta. Eso explicaba que Emiliano estuviera con ella. Cada vez más impresionado sonreí como un niño y me obligué a apartar la vista de ella. No quería acosarla. Tendría que hablar con mi hermano al volver a casa y pedirle consejos o regresar con Rocci, porque mis dotes como conquistador y amante de una noche me estaban comenzando a preocupar.  El taxi se detuvo frente a su hotel, que casualmente era el mío. Ni siquiera me había dando cuenta cuando ella le soltó el nombre al taxista de lo atontado que me sentía obse
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Deseo irresistible
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Erika Camel Caminamos saliendo del bar tomados de la mano, sonriendo como dos niños, aunque nada más lejos de la realidad, no había inocencia en lo que haríamos. «Eso lo podía garantizar, de mi cuenta corría». Esas eran las ventajas de ser libre, la capacidad de poder tener sexo consensuado sin tener que darle explicaciones absolutamente a nadie. Solo la llama del deseo daba las órdenes esta noche, y de nosotros dependía únicamente si lo repetíamos, si nos buscábamos luego. Estaba deseosa de él, y mientras más sucios mis pensamientos , más sensacional se volvía la ocasión. La anticipación me tenia más excitada que en cualquiera otra noche de sexo anterior en los últimos seis años. Eso, unido a la euforia de haber logrado arrastrarlo conmigo a mi hotel, me tenían radiante. Ya nada se interponía entre su cuerpo y el mío desnudos, o bueno si, quizás un poco de ropa. Eso se arreglaría tan pronto la puerta se cerrará a mi espalda. En el ascensor fue imposible que ese hombre, casi un a
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Monumental Gimnasio
Cazando al Ceo. /Anne Zamora
 Derek Meyer   ¿Cómo diablos paré  trayendo a mi cama a una hembra de fuego y volcán? Sería una buena interrogante, aunque la respuesta era sencilla. Esa diabla me había ganado la partida desde que la vi  sentada en la primera fila del auditorio, aún dictaba la conferencia cuando ya había comenzado a fantasear con su cuerpo, con tenerla así dispuesta y solo para mi.  No era solo su belleza salvaje, era esa forma de mirarme, la atención que me ponía. Su forma de hacerme sentir el centro de atención, y no es que fuera geocéntrico, es que nadie me ponía esa atención. Nadie me miraba así.  Leer más
Cómo si fuera Amor
Cazando al Ceo. /Anne Zamora
Erika Camel  Desperté un poco adolorida, me ardía entre las piernas, y la pelvis la sentía como si hubiese corrido una maratón; de hecho eso era  exactamente lo que había ocurrido, un maratón de sexo intenso. Recién me di cuenta que el cuerpo desnudo de Derek Meyer estaba junto al mío, y me volví a sentir radiante. Si antes quería tenerlo en mi cama, ahora lo necesito con desesperación en mi vida. Este hombre tienen que ser mi amante, mi folla amigo, mi amigo con derecho... lo que sea, pero lo necesito en mi vida. Sus brazos bronceados estaban sobre mi, ¿abrazándome?, ¿podría alguien ser tan violentamente vehemente y tierno a la vez?
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Cazando al Ceo. /Anne Zamora
  Derek Meyer     Quedé en la puerta de mi habitación hasta que aquella mujer ataviada con sensual vestido de fiesta siendo plenas dos de la tarde desapareció por el elegante corredor del piso de las exclusivas Suite Presidenciales del hotel Ritz,  no sin antes voltearse a mirarme, lanzarme un beso y despedirse agitando su mano. Podría decir que se veía ridícula, cursi, incluso falsa por un gesto tan intimo a apenas unas pocas horas de conocernos; o que su pelo alborotado por la pasión de mis manos se veía desaliñado y mal, pero no, solo tenía ojos para su perfecto par me nalgas alejándose de mi. Me quede en el umbral hasta que la perdí de vista, me mantuve allí unos breves segundos fantaseando  con el momento en que regresaba corriendo a mis brazos y ambos perdíamos los vuelos. «¡Mier
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