Un mes ha pasado y ahora están de visita en el país donde fue secuestrada Camila, están aquí con el único propósito de hacerle una visita a la señora que la ayudó a escapar. Le han ofrecido su ayuda, pero la doña se niega a recibirla porque dice que allí se siente bien, además de que ha conocido a un hombre de su misma edad y cree que será adorable pasar el resto de su vida a su lado.
— No me habías dicho que tu verdadero esposo es muy guapo, mi niña. —Le comentó en secreto la amable señora, a Camila.
— Él es el hombre más hermoso ante mis ojos, él es el amor de mi vida, señora hermosa.
Confirmó Camila, muy orgullosa de lo que tiene y le pertenece solo a ella.
Nuevamente, la señora agradeció a Camila por haberle dejado toda la riqueza que ella le sacó al hombre que la obligó a casarse con ella. Además, Nataniel fue al tribunal y ordenó anular ese matrimonio después de presentar las pruebas verídicas de que a ella la obligaron a hacerlo, siendo testigo el mismo juez que los casó, él ab