MASSIMO
Estoy de pie afuera de la boutique que de nuevo es de Aurora y la miro sonreírme de la manera que me gusta
—Esta noche llegare algo tarde—digo recordando todo el trabajo atrasado que tengo debido a mi viaje a Génova. Ella hace un lindo mohín y le doy un beso rápido
—Bien—dice resignada—Esta tarde tenemos la prueba del vestido de novia para Lissa— me acercó y la rodeo con mis brazos
—Quizás deberías mirar algo para nuestra boda—le digo antes de inclinarme un poco y repartir algunos besos por su rostro.
—Que empalagosos son ustedes dos—dice Marcelo desde el interior. Aurora le hace una peineta
—Vete a la mierda Marcelo—respondo riendo. Si. Soy un empalagoso, pero solo con ella. Miro la mano donde descansa el anillo de compromiso y no puedo sentirme más feliz. Dentro de un mes será mi esposa y eso es un hecho
—Veré que puedo hacer—habla a la vez que coloca sus manos en mi pecho—Ahora ve a trabajar, así llegaras rápido a casa—dice tranquilamente. No sé si ella se ha dado cuenta, p