—Orale, Hank Brown, dime la neta. ¿Te pusiste roñoso con todos los clientes? ¿Qué chinados hiciste?
Hank Brown había cerrado un chingo de negocios pa' la empresa, generando lana a manos llenas. Desde que se graduó, se juntó con la compañía de Electrónica Waltham y le había echado ganas por un buen de años, siendo uno de los veteranos de la tropa. El jefe le tenía bien puesta la mira y se apoyaba cañón en él.
Aunque había muchos gerentes en la empresa, Hank Brown era el más joven de todos.
Debido a los grandes beneficios a la compañía, Hank fue ascendido rápidamente a gerente. Aunque otros miembros del equipo directivo sentían envidia, no podían decir nada al respecto.
El jefe valoraba mucho a Hank Brown e incluso cuando no podía asistir a eventos comerciales, le pidió que fuera en su lugar para establecer contactos y atraer a más clientes para la empresa.
Y Hank Brown nunca le decepcionaba. Después de asistir a ese evento, logró firmar muchos contratos para la empresa.
Sin embargo, aho