Stefanos

"¿Viste eso, Rylan?"

Mi voz salió baja, pero cargada del peso que ese entrenamiento había dejado en el aire.

Lo estábamos observando desde el balcón que daba al campo. De lejos, pero con cada sentido atento.

Él, a mi lado, se cruzó de brazos, la mirada fija en la figura de Jason que aún estaba parada allí, con los ojos clavados en mi hija.

"Sí," respondió con esa calma tan suya. "Y para ser sincero... es más de lo que esperaba."

Solté un gruñido bajo, pero contenido.

"El chico es rápido. Demasiado."

"Rápido... fuerte... y tiene instinto," completó Rylan. "No es solo entrenamiento. Es algo natural en él. Está en la sangre. En los dos linajes."

Asentí, aún con la mirada pesada.

"Tiene mi sangre... pero también la de Eclipse. No podemos olvidarlo. Tengo algunas dudas sobre cuál de las dos ganará si se le pone a prueba."

Sentía una opresión en el pecho. No eran solo celos. Era preocupación. Era... miedo, algo que no quería admitir.

"¿Crees que tiene control?" pregunté, mirando a