Eduardo rio por eso, donde Alejandro aprovecho y le dio un fuerte abrazo a su hermano.
- Te extrañe mucho, idiota.
- Perdón por tardarme – menciono apenado el rubio.
- Gaooo – en eso se escuchó un fuerte rugido, donde todos los invitados vieron como un gran león corrió y tacleo al rubio derribándolo y tirándolo al suelo.
Esto asusto a algunos, pero notaron que el gran felino estaba lamiendo al rubio, aunque de un momento a otro este empezó a morderlo a modo de regaño y justo en eso ingresaron 4 cachorros de león y una gran leona siguiéndolos.
- Waaa Zeus hehe si yo igual te extrañe y ¡hey! si me estas mordiendo duro – se quejó el rubio, sin dejar de acariciar al gran felino – ya, ya lo sé, perdón por irme así amigo.
- Mami… ¿quién es? – pregunto Sara abrazándose de la pierna de ella, mirando atentamente a ese rubio jugar con su gatito.
- Él es tu hermano mayor, Eduardo - dijo Helena, quien se miraba emotiva y feliz de ver a su tercer hijo.
Al escuchar eso, todos miraban asombrados al