— Coronel, hemos registrado toda la zona, pero aún no tenemos indicios de que la rehén se encuentre en este lugar.
Sin duda, Alexander se sentía frustrado y empezaba a dejar una impresión negativa sobre este lugar.
— Retirada. Regresemos a la base y perfeccionemos más investigación para descubrir su paradero, no pudieron ir muy lejos de eso, estoy completamente seguro. —respondió Alexander mientras comenzaban a ir hacia los vehículos.
Sentía una sensación en el pecho de que en cualquier momento algo grave podría pasar.
***
Ricardo se acercó a Aurora, su sonrisa sarcástica y cruel. Aurora se alejó de él, intentando escapar, pero Ricardo la agarró con fuerza.
—No te preocupes, mi amor —le dijo, su aliento cálido en su oído—. Esto solo será un recordatorio de quién está al mando aquí.
Aurora intentó luchar, pero Ricardo era demasiado fuerte. La empujó contra la pared y comenzó a besuquearla, su boca áspera y desagradable. Aurora se sintió como si estuviera siendo violada de