—¡Nessa! —exclama Vaiana mientras se hacer a Vanessa quien sigue llorando contra las piernas de su abuela.
—Tu hijo acaba de humillar a mi hija—son las palabras de Nicolau al momento que cierra la puerta de la cocina y solo quedan ellos dentro de la casa.
—Marcus no humillo a Vanessa—asegura Klaus con total tranquilidad—. Solo la salvó y evitó que todo se volviera un escándalo mayor.
—¿Qué está insinuando? —Radu, aunque no tiene idea de que pasa, si entiende lo que el mayor dice y que Vanessa sea puesta en duda es algo que no va a permitir.
—Por favor, vamos a calmarnos y hablemos—son las palabras de Marcus mientras se coloca entre su padre y Nicolau.
—¡¿Dónde están tus testigos?! —Nicolau no puede evitar explotar al preguntar.
—No los necesito —es la tranquila respuesta de Klaus—. Nicolau, eres un amigo al que tengo gran aprecio y al que nunca me atrevería a ofender, y mucho menos a tus hijas…
—¿Te atreves a decir eso mientras ofendes a mi hija?
Sin querer alzar la voz o caer en una