CONTRATO; INFIERNO TENTADOR
CAPÍTULO 47; Egocéntrica
—HARRISON—
—Dos días después—
Dejo caer mi cuerpo en la cama, el sudor baja por mi frente y mi respiración descontrolada se puede escuchar en la habitación, igual que la de Claudia, su cara está roja y el sudor baja por medio de sus senos.
—¿Sabes que te ves hermosa? ¡Carajos, me encantas! —se ríe y la agarro por la cintura para que quede cerca de mí y besarla—. Me gusta estar contigo.
—A mí también me gusta, ¿dónde aprendiste a complacer a una mujer tan bien? Casi muero de tanto gritar —se vuelve a reír. Cada vez que sale con cosas así se pone más roja de lo normal.
—Secretos —hago un gesto de desinterés y me empuja.
—Payaso —me dice. Me queda mirando—. ¿Desde cuándo cambiaste tanto? Tengo pequeños recuerdos de ti cuando eras adolescente y no eras nada atractivo.
—Creí que nunca te habías fijado en mí. Y cambié gracias al gimnasio, Julio me animaba a ir, ya después iba yo solo hasta que un día me miré en el espejo y había cambiad