C207-CONFESIONES ENTRE DRAGONES.
C207-CONFESIONES ENTRE DRAGONES.
Al día siguiente, Ashley abrió los ojos un poco aturdida. Lo primero que sintió fue el calor de las sábanas y lo segundo, el vacío a su lado.
Estaba sola.
Y los recuerdos cayeron de golpe sobre ella. El salón, la humillación, Drakos... su cuerpo sobre el de ella, sus manos, su boca, su voz ronca diciéndole que era su debilidad.
Se llevó una mano a los labios y sintió vergüenza, pero también algo más peligroso: aceptación.
Porque sí, lo deseaba. Sí, lo había querido desde hacía tiempo. Y por primera vez, se permitió admitir que ya no estaba segura de poder seguir luchando contra lo que sentía por él.
Pero tenía miedo.
Él era su destinado.
Pero… ¿Y si no lo era ella para él? ¿Y si Drakos ya tenía una compañera elegida? ¿Una dragona?
Ashley apretó las sábanas y se recordó que no podía permitirse ilusionarse.
No allí y menos, con él.
Mientras tanto, en las termas privadas del palacio, el vapor flotaba entre las rocas volcánicas, envolviendo el lugar en calo