C129-ALEMÁN CON CARA DE PASTEL VENCIDO.
C129-ALEMÁN CON CARA DE PASTEL VENCIDO.
El Mercedes negro se detuvo frente al elegante edificio y un valet se apresuró a abrir la puerta trasera. Adler descendió del vehículo con absoluta calma. Llevaba un impecable esmoquin oscuro, el cabello peinado con precisión, el rostro sereno y seguro. Con un gesto calculado, rodeó el auto y abrió la puerta del lado opuesto.
—¿Lista?
Kate colocó su mano en la de él y salió con gracia. El vestido verde esmeralda que llevaba se ajustaba a su figura como una segunda piel, dejando al descubierto su espalda y realzando cada curva. Su cabello caía en ondas suaves y sus labios, de un rojo profundo, contrastaban con la tela del vestido.
—Impresionante —murmuró Adler, ofreciéndole el brazo.
Ella dudó un segundo y luego lo aceptó con una sonrisa amable.
—Gracias por el vestido.
—No lo agradezcas aún —respondió él, mientras cruzaban la alfombra roja entre flashes de cámaras y miradas curiosas—. Lo mejor de la noche apenas comienza.
Adentro, el salón desb