~CHRISTIAN~
El mundo se detuvo en el momento en que vi a Zoey rodando por las escaleras de mármol. Mi cerebro tardó algunos segundos en procesar lo que estaba pasando: mi esposa embarazada cayendo por los escalones duros, su cuerpo contorciéndose en ángulos imposibles, el sonido terrible del impacto resonando por el pabellón.
"¡ZOEY!", grité, soltando todo lo que tenía en la mano y corriendo hacia las escaleras.
Todo el pabellón se había detenido. Cientos de personas miraban horrorizadas la escena, pero yo solo podía verla a ella: mi mundo entero esparcido en el suelo de mármol, rodeada por un charco de sangre que crecía a cada segundo.
Llegué hasta ella y me arrodillé en el suelo, mis manos temblando descontroladamente mientras tocaba su rostro pálido.
"¡Zoey, Zoey, háblame!", mi voz salía desesperada, quebrada. "¡Quédate conmigo, amor!"
Trató de enfocarse en mí, sus ojos luchando por permanecer abiertos. Cuando finalmente logró hablar, sus palabras me destrozaron completamente:
"No