Di que sí.
Al día siguiente, era domingo un lindo dia aproveché para irme con manu a su finca, tenía mucha curiosidad para conocer la sorpresa que me había dicho.
Una vez que llegamos, me percaté de que todo el lugar estaba en silencio, no me contuve y pregunté — ¿ Dónde están los funcionarios?, a la vez buscaba con mi mirada a las personas que solían estar trabajando ahí.
— ¡Cariño! Hoy es domingo, tienen libre—¿ acaso no quieres estar a solas conmigo?
— Ahhh…¿ Entonces sólo estamos los dos?
Aún no me recuperaba de la noche que pasamos juntos y ahora esto.
— Fue eso que te dije, pero aún no me respondiste. ‐¿ Acaso me tienes miedo?
— Mmm…. No, ese no es el caso,¡ solo me sorprendió encontrar vacío el lugar! Siempre está tan llenó de gente.
Disimule mi nerviosismo.
— Si es así, vamos a entrar.
Le seguí el paso, sabía bien que él no me haría nada sin mi consentimiento.
— Te invite hoy porqué, quiero pasar él día sólo contigo, esa es la razón por lo que envíe a los f