Unas semanas más tarde tenían la prueba que confirmaba lo que Jack, Valentina y todos los que podían ver a Lorenzo sabían. La cocina de la casa de Valentina y Jack parecía una sucursal de amor y bodas así que Antony estaba atrincherado en su casa preparando la boda. Lorenzo estaba viendo junto a Antoni unas telas que querían usar para decorar la iglesia. Jack le dio un beso a su novia y otro a su peque hijo.
—Valentina ¿estoy invitado a tu boda?
—¿Qué?, ¡claro hombre! Eres hasta mi decorador.
—¿Te gusta pasar tiempo con Tony?
—Sí, no le cuenten a mi mamá pero me gusta más el arte que las empresas.
—Voy a preparar la cena.
Los tres hombre levantaron la cabeza para mirar a Valentina la cual estaba contestando un mensaje en el celular. Vio a Lorenzo y sonrió.
—Mira Lorenzo, soy al favorita de mi papá y mis abuelos y todos creían que iba a ser la mejor doctora de la historia, pero, me gusta modelar y m