Capítulo 24

—Ya vi la cicatriz en tu pierna —indicó, después de un rato.

—Eso es diferente.

Ella estaba segura de que lo que hubiera bajo el parche sería mucho menos turbador que la imagen que conjuraba su mente, pero cedió de inmediato.

—Está bien, Juan, no te molestaré más.

Él se dio vuelta y la atrajo, frotando su mejilla sana contra la de ella.

—Todos necesitamos guardar algo para nosotros, Daniela —la miró—. Estoy seguro de que hay muchas cosas acerca de ti que no sé, aun cuando hayamos hablado sin parar acerca de nosotros durante días, pero creo que cada individuo debe guardar algo para sí… solo para permanecer como individuo. Daniela no estaba convencida de que le gustara lo que escuchaba.

— ¿Quieres decir que he sido demasiado extrovertida acerca de cómo me siento por ti?

— ¡Dios Todopoderoso, no! —la sacudió con fuerza—. No es eso lo que quise decir. Me fascina tu sinceridad y tu falta de afectación. Tu respuesta hacia mí ha hecho más por mi convalecencia que cualquier cosa que pudier
Leia este capítulo gratuitamente no aplicativo >

Capítulos relacionados

Último capítulo