ALEXANDER

Me encuentro de nuevo despues de mucho tiempo en la ciudad que me dio mi reconocimientos, estoy encargándome de unos negocios de la manada, y debo contratar para realizar nuevas construcciones y cambios en el lugar para las nuevas especies, pues mi manada es un poco variada, como ya saben no soy un alfa..

El linaje y nuestro nuestros antepasados nos dicen que normalmente un alfa es quien riena en una manda, pero mi manada, de donde vengo yo, mi alfa quedo sin heredero al morir en batalla, decidió retirarse y busco entonces su reemplazo, las hazañas al lado de mi alfa Anjhara, me ayudaron a tomar este nuevo puesto.

En la antigua manada a la cual pertenecía decidí aléjarme debido a mi pequeña mate, es decir, mis planes son esperar a que sea mayor de edad y llevarla conmigo, hoy cumple dieciocho y es casi toda una mujer, ahora menos que nunca debo acercarme a ella, no podre controlarme..

—Por aquí por favor señor Alexander.

Veo como la secretaria de la arquitecta menea su